Vicente Fuster Ruiz, conocido futbolísticamente como ‘Fragua’, ha pasado 45 días en la región de Haikou (en China), aumentando su experiencia como entrenador y acrecentando su bagaje como técnico futbolístico. Asentado en la isla de Hainan, ha estado del 26 de julio al 9 de septiembre como entrenador de porteros del Hainan Boying Seamen FC y Selección China U-17.

 En ese tiempo, el club chino ha disputado tres encuentros (con un bagaje de 2 victorias y una derrota). ‘Fragua’ ha calificado esta experiencia como “extraordinariamente enriquecedora”, ya que le ha permitido “formar parte de un proyecto 100% profesional, con sesiones tácticas y de vídeo, entrenamientos específicos y charlas tácticas al más alto nivel”.

 Sobre ‘Fragua’ recaía la responsabilidad de formar y mejorar las prestaciones de los tres guardametas (Chen Jiahao, Liu Yang y Wang Haoyi) de un club que se creó en 2015. Aunque se trata de una entidad deportiva de muy reciente creación, “el nivel de exigencia es muy grande y se reclaman resultados desde el primer minuto”.

 El técnico poblano destaca la “enorme predisposición al trabajo” de los tres porteros que ha tenido a sus órdenes: “Hay mucho margen de mejora, porque algunos fundamentos futbolísticos que son básicos en el fútbol occidental no eran tomados en cuenta en China. Pero, en líneas generales, sólo puedo decir que son tres cancerberos con muy buenas condiciones, que han mejorado notablemente en el poco tiempo que he estado en China”.

 ‘Fragua’ explica que la barrera idiomática y cultural ha sido la principal dificultad: “El comportamiento del club ha sido en todo momento exquisito, pero no ha sido fácil trabajar en China. Tienen una manera de ser muy diferente a la de España, apenas he podido aprender alguna palabra de su idioma y he tenido que usar a un traductor o mi propia imaginación para hacerme entender. Aún así, hemos establecido unas rutinas de trabajo que han surtido su efecto. Lo único que lamento es no haber podido preparar el tercer encuentro, en el que el Hainan Boying Seamen FC fue derrotado. Quizá si hubiera podido trabajado más con los porteros habría conseguido el equipo un mejor resultado”.

El entrenador de la Pobla de Vallbona explica que el clima también ha sido una dificultad añadida: “Soy valenciano y en nuestra tierra estamos acostumbrados al calor y la humedad… pero entrenar, mañanas y tardes durante dos o tres horas cada vez, con una humedad que superaba el 90% es algo imposible de explicar. Los primeros días fueron de una aclimatación posible, pero debes ser profesional y amoldarte a lo que sea. Si los futbolistas aguantan esas condiciones, yo debo soportarlas y acostumbrarme rápido, cosa que logré en pocos días”.